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LA INFLACIÓN EN MÉXICO SE DISPARA HASTA EL 6,05% EN ABRIL, EL MAYOR NIVEL DESDE 2017

El incremento de los precios se debe principalmente a la evolución del petróleo y del gas, según el INEGI

El País/Marca Registrada Noticias

La inflación en México se elevó hasta el 6,05% en la primera quincena de abril en términos anuales, el mayor nivel desde diciembre de 2017, según ha publicado este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). El incremento de los precios respecto a la quincena anterior fue del 0,06%, la mayor subida quincenal desde 2009. Al aumento ha contribuido sobre todo la recuperación del petróleo y del gas, cuyos precios tocaron fondo hace un año por el golpe de la pandemia.

Aparte del peso de los energéticos en el aumento de la inflación, los precios de algunos alimentos experimentaron fuertes subidas quincenales, entre ellos el chile serrano, con un 25,13%, y el jitomate, con un 18,84%. Por tipo de consumo, el transporte fue la categoría que registró un mayor incremento, con un 16,01%, seguido de los muebles y artículos de hogar, con un 6,29%. La cifra general ha superado las expectativas de los analistas. Un sondeo de Reuters proyectaba una inflación de 5,84%.

El nivel de inflación de abril se sitúa muy por encima de los objetivos del Banco de México, cuya meta es mantenerla en torno al 3%. Los datos revelados este jueves hacen poco probable una vuelta a corto plazo a la política de recortes en las tasas de interés. Después de una serie de reducciones en 2020 como respuesta a la crisis económica del coronavirus y que la situaron en un 4%, la institución bancaria citó en marzo las expectativas de un incremento en los precios del consumidor y descartó en ese momento más reducciones.

Los analistas de Banco Base esperan que se mantengan las tasas de interés en la próxima reunión del banco central, prevista para mediados de mayo. “A pesar de la amplia holgura económica resultado de la lenta recuperación económica, la presencia de presiones inflacionarias dificulta adoptar una postura monetaria más flexible, pues se eleva el riesgo de deteriorar la credibilidad del banco central y de distorsionar las expectativas de inflación ocasionando un desanclaje”, apunta un reporte.

Pese al fuerte golpe que encajó la economía mexicana el año pasado, con una caída del PIB del 8,5% respecto al año anterior, hay señales de recuperación, en parte supeditadas al avance de la campaña de vacunación. La Asociación de Bancos de México se ha mostrado optimista sobre un repunte de los créditos. “Seguramente veremos un crecimiento que empiece a repuntar particularmente a partir del segundo semestre de este año”, declaró el presidente de la organización, Daniel Becker. “Hay datos alentadores, y esto se verá directamente relacionado con el crecimiento de la demanda de crédito”.

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